Cómo diseñar un buen cartel
Aunque no hay reglas escritas sobre cómo debe ser un cartel de evento, allá van algunas pautas y consejos que os pueden venir bien de cara a la temporada de festivales y galas de fin de curso.
El cartel es una forma de atraer la atención de nuestro futuro espectador a través de imágenes y palabras. El objetivo principal es informar acerca del espectáculo de forma que el espectador sienta curiosidad y desee asistir.
Imágenes
Utiliza imágenes atractivas, es lo primero que verá el espectador y deben generar curiosidad y expectación. Tienen que ser evocadoras, sugerentes y que “expliquen” el concepto del espectáculo. Además de crear emociones. Es importante que las imágenes que uses sean de buena calidad, con resolución suficiente y que tengan un buen encuadre. En Freepik, Unplash o Gratisography tenéis multitud de imágenes de licencia de uso libre.
Puede darse el caso de que te guste mucho una imagen que te hicieron en algún evento y quieras utilizarla. Ponte en contacto con el fotógrafo, la mayoría somos almas sensibles y agradecidas a las que nos encantará ver nuestra foto en vuestro cartel, siempre que os acordéis de mencionarnos. Y si necesitáis modificar la fotografía para integrarla en el cartel (cambiar colores, retocar lomillos, añadir cuernos…), no dudéis en preguntarnos.
Colores
Usa colores que enfaticen la idea principal. El color es un elemento expresivo muy potente y cada color suele estar asociado a una simbología: rojo pasión, blanco pureza, amarillo alegría. Hay que ser cuidadoso a la hora de combinar los colores y utilizar armonías de color para que el cartel sea atractivo y no un batiburrillo. Si esto de los colores os suena a chino singapuriense, siempre podéis buscar la inspiración coloril en Design Seeds.
Alegría, fiesta, verano, infantil
Misterio, elegancia, femenino
Composición
Menos es más, repítelo como un mantra, por algo es el lema del diseñador por excelencia. Incluye solo la información relevante, los elementos justos. Como he mencionado arriba, el objetivo de un cartel es atraer al público, pero también es muy importante que el mensaje llegue claro no, clarísimo. Para añadir florituras y brillis brillis siempre hay tiempo 😉
Juega con los pesos de textos e imágenes, establece una jerarquía de información y un flujo de lectura. Por lo general se utilizan una o dos imágenes de fondo, el nombre del evento se ubica en la parte superior a un tamaño más grande que el resto de textos. Le sigue la descripción o participantes del evento junto con la fecha. Y por último los datos de localización, acompañado de los logos de patrocinadores, etc. El orden y los contenidos son solo una sugerencia, todo dependerá de lo que os interese resaltar.
Tipografía
Por favor, textos legibles. ¡Gracias! Hay cientos de tipografías disponibles por los vastos parajes de internet, algunas son verdaderamente espectaculares… en la demo. Porque cuando las aplicamos a nuestro texto no sabemos si pone “Warriors” o “Guarroman”. ¡Y mira que son majos los jienenses! Pero puede que no sea lo que queríamos transmitir. Dafont tiene un estupendo catálogo con sus autores y respectivas licencia de uso.
No abusar de los efectos de texto. A veces queremos llamar tanto la atención de nuestro evento que tendemos a sepultar el texto bajo miles de efectos: brillos, volumen, sombras, contornos…
La legibilidad es muy importante.
Un cartel, por muy bonito que sea no sirve de nada si no se lee.
¿Horizontal o vertical?
En principio nadie sabe afirmar cuál de las dos orientaciones es mejor. Pero sí que es cierto que cada red social tiene su propio formato, por ejemplo en Facebook o Twitter el formato horizontal es más popular y cómodo de leer. Valora la posibilidad de tener el cartel adaptado a cada una dependiendo de en qué soporte vayas a darle difusión (redes sociales, cartelería impresa).
Ejemplo de cartel horizontal
Ejemplo de cartel vertical
Imprenta
Si vas a hacer impresiones habla primero con tu imprenta, pregunta dudas, concreta detalles de impresión, papeles, formatos, modo de entrega… Ellos estarán encantados de ayudarte en todo porque es una forma de ahorrar en tiempo y recursos por ambas partes. También es recomendable realizar al menos una prueba de impresión.
Y por último y no menos importante, si ves que todo esto del diseño se te queda grande y quieres un resultado de calidad, contrata a un profesional 🙂